martes, 25 de octubre de 2011

El amor... (analisis)

Este tema lo tocamos en filosofia... y he aqui lo que rescato acerca de él, a traves de las oraciones de la madre teresa de Calcuta...

El amor


Estamos, seguramente, en una época en donde no sabemos amar, donde no sabemos lo que es el silencio, la paz interior, el orden interno, la felicidad. Nos encontramos pues, en una etapa en que el hombre no sabe para que existe, en la etapa de lo sensitivo, que la domina, majestuosamente el placer.
¿Dónde estamos? Estamos en la vida manejada por pocos que tienen mucho, cuando hay muchos que tienen muy poco incluso nada. Es cierto que el trabajo de la madre Teresa de Calcuta es el verdadero amor, aunque sea una gota en el océano, como dice ella o un grano de arena en la playa, pero si no está, algo le falta al océano o a la playa.
Una persona realmente ama cuando duele, como decía San Alberto Hurtado. Esto es muy profundo, un ejemplo claro de esto sucede cuando después de haber negado tres veces a su maestro, Pedro es cuestionado por este, con la siguiente pregunta: “¿Me amas”?, pregunta a la cual no se puede escapar, y Pedro respondió: “Señor, tú sabes que te amo”.
En la oración titulada “En la muerte”, podemos llegar a que en esta vida lo material no es lo más importante, el “tener” no lo es todo, sino el dar, el darse al otro. Deberíamos pasar de “teneres” a “dares”, a compartir con el mundo lo que tenemos que dar, a hacer el bien, a en definitiva  a entregarnos a nuestro prójimo.
Ahora hacemos las cosas pequeñas casi por obligación, ejemplo de esto es un favor a nuestros padres, el cual lo hacemos refunfuñando, reclamando y pidiendo explicaciones de el por qué nosotros tenemos que hacerlo. Si pusiéramos una gota de amor en las pequeñas acciones tendríamos un mundo mejor. Si tuviéramos el pensamiento de que mi trabajo no me afecta sólo a mí, sino que a un montón de personas que están, sin quererlo, relacionadas por cosas del destino. Si en cada palabra pusiéramos un destello de amor, todo sería mejor.
La lepra y la tuberculosis eran enfermedades que afectaban al mundo en la época de la Madre Teresa, ahora nosotros podríamos decir que son el Cáncer y el Sida, los que perjudican al mundo, pero ¿Sabemos lo que es tener Cáncer?, ¿Sabemos cuánto sufre una persona con Sida?, ¿Sabemos que es vivir en la pobreza extrema?, ¿Sentimos ese dejo de soledad o esa discriminación que sufre alguien por Sida? No podríamos a menos que padeciéramos eso, pero nada cuesta preguntar por el vecino enfermo, nada cuesta visitar al abuelo olvidado, nada cuesta compartir con un pobre, nada cuesta abrir el corazón.
No hay nada más exquisito que comerse un sándwich cuando tenemos hambre. Nada más placentero hay que tomar agua cuando tenemos sed. Parece ilógica la manera de pensar de la Madre Teresa con la oración para aprender a amar. La idea de esta oración es dejar, literalmente, el egoísmo de cada persona a un lado y fijarse en el prójimo, en alguna carencia que tenga, para ayudarle a vivir mejor.
Aunque levanten infamias sobre ti, aunque sea contradictorio, hay que hacer el bien, tanto para uno, para el prójimo y para Dios.  

No hay comentarios:

Publicar un comentario